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Rev. chil. nutr ; 38(3): 356-367, set. 2011. ilus
Artículo en Español | LILACS | ID: lil-608793

RESUMEN

Omega-3 long-chain polyunsaturated fatty acids (ω-3 LCPUFA) eicosapentaenoic acid (EPA) and docosahexae-noic acid (DHA) are found in significant amounts in fatty fish (tuna fish, mackerel and salmon) and especially in the oil obtained from these species, which is actually utilized as a nutritional supplement (nutraceutical). After ingestion, both EPA and DHA are rapidly incorporated into cellular membrane phospholipids where they can be released by lipooxygenases and cyclooxygenases enzymes and transformed in powerful bioactive products wich have cytoprotective and especially anti-inflammatory activities. Clinical and epidemiological evidence have firmly established that consumption ofEPA and DHA may contribute to the prevention and / or treatment of a number of diseases, especially those where inflammation plays a remarkable role in its development. EPA and DHA exhibit potent anti-inflammatory properties, either via the generation of anti-inflammatory products, such as the resol-vins, or by blocking inflammatory agents. In the present paper we review possible clinical applications of EPA and DHA in pathologies, such as cardiovascular and neurodegenerative diseases, cancer, inflammatory bowel disease, rheumatoid arthritis and ischemia - reperfusion injury. The evidence suggests that ω-3 LCPUFA may have promising applications in the prevention and / or treatment of different clinical and nutritional pathologies.


Los ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga omega-3 (AGPICL ω-3) como el ácido eicosapentaenoico (EPA) y docosahexaenoico (DHA) se encuentran en cantidades importantes en los pescados grasos (atún, jurel y salmón) y especialmente en el aceite obtenido de estas especies, el cual actualmente se utiliza como suplemento nutricional (nutracéutico). Tanto el EPA como el DHA, luego de ser ingeridos, se incorporan rápidamente a los fosfolípidos de las membranas celulares donde pueden ser liberados por enzimas lipooxigenasas y ciclooxigenasas, originando productos con potentes propiedades citoprotectoras y especialmente antiinflamatorias. La evidencia clínica y epidemiológica de múltiples estudios permite establecer que el consumo de EPA y DHA puede contribuir a la prevención y/o tratamiento de una serie de patologías, especialmente aquellas donde la inflamación juega un papel preponderante en su desarrollo. El EPA y el DHA presentan propiedades antiinflamatorias, vía la generación ya sea de agentes anti-inflamatorios, como las resolvinas, o a través del bloqueo de agentes pro-inflamatorios. En el presente artículo se presentan evidencias sobre las posibles aplicaciones clínicas de los AGPICL ω-3 en patologías tales como las enfermedades cardiovasculares, neurodegenerativas, cáncer, enfermedad inflamatoria intestinal, artritis reumatoidea e injuria por isquemia - reperfusión. La evidencia sugiere que los AGPICL ω-3 pueden tener promisorias aplicaciones en el tratamiento y/o la prevención de diferentes patologías clínicas o nutricionales.


Asunto(s)
Humanos , Artritis Reumatoide/terapia , Enfermedades Cardiovasculares/terapia , Ácidos Grasos Omega-3 , Ácido Eicosapentaenoico , Usos Terapéuticos , Neuroprotección , Neoplasias/terapia , Enfermedades Nutricionales y Metabólicas/terapia
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